Los pescadores del oeste de Africa decoran sus barcas con vistosos motivos geométricos; vistas de lejos, cuando llegan al
atardecer, la playa se convierte en un enorme mosaico de color. Atraídos por su belleza, nos preguntamos si tras su largo
periplo oceánico, aquella madera estaría en condiciones de empezar otra vida,”reencarnarse “en mueble; pocos como los
africanos saben tanto sobre”reutilizar”. La cuestión era si la madera, después de dejar de ser barca, podría irradiar la misma
energía y preservar su historia, la de los pescadores del oeste de Africa.